17 marzo 2010

El duro traspié y la despedida de Real Madrid

T.I. 2010 – REAL MADRID
Sin reproches y alentando hasta el último momento, así fue como se manifestó el centenar de hinchas de Real Madrid que despidió a sus jugadores el pasado domingo, tras la caída del xeneize por 2-0 frente a Defensores del Carmen, y su consiguiente eliminación del Torneo del Interior (Argentino C) de fútbol, en la primera ronda de la etapa final del certamen.
El Sureño

LA PANDILLA. La seguidora hincha de Real Madrid, tras la finalización del partido.

En sus dos anteriores participaciones, los dirigidos por Carlos Hernández habían alcanzado la misma instancia (en 2007, tras perder 1-0 aquí e igualar en 1-1 con Deportivo Sarmiento, de Chubut), y en 2009 quedaron últimos en la zona, detrás de los ushuaienses de Los Cuervos del Fin del Mundo y Mutual Banco Tierra del Fuego, y de los riograndenses de Victoria.
El capitán. Maximiliano Retamales, habitual zaguero madridista, esta vez se desempeñó desde el vamos como un ocupante más de la zona media.
«El Tano me dio libertad para moverme como 5, ayudando al Chelo Sánchez. Nos complicó el hombre de menos y en el primer tiempo creamos varias situaciones de gol y no pudimos meterla. Nuestra fórmula era arriesgar y meter un gol lo más rápido posible, pero no se pudo. Al final no podía más, había corrido un montón. En un momento me tiré en el mediocampo, sentí una molestia, pero pude terminar el partido».

Gracias a todos

Carlos Hernández, el responsable máximo de Real Madrid, consideró que «esto es fútbol, es muy simple, todo el trabajo se hizo bien casi hasta el final, en dos ataques entraron las pelotas que no habían entrado antes. Triste e injusto, pero es así».
Ahora Real Madrid buscará en el certamen local ser el equipo local con más participaciones a nivel regional: lleva tres (las dos últimas en forma consecutiva), igualando lo realizado por O’Higgins (1987/1992/2007) y Estrella Azul (1989/1990/1991).
«Hay que seguir trabajando, y ojalá tengamos una nueva chance de jugar esto que es tan lindo. Tengo que agradecer el sacrificio de todos los pibes, el esfuerzo enorme que hicieron, han dejado la vida dentro de la cancha y fueron unos excelentes representantes de la ciudad».
La expulsión de Horacio Bigurrarena, a los 25 minutos de la primera mitad, dejaría su huella en el resto del partido. «Nos complicó muchísimo, salimos a hacer un planteo tranquilo. Tuvimos chances y no lo pudimos liquidar».
Con los fieles seguidores del xeneize ocupando la tribuna de madera que da a la calle Piedra Buena, el entrenador de los de Chacra II se despidió agradeciendo «fundamentalmente a los jugadores, a toda mi familia, mis hermanos, mi vieja, mi señora, mis hijos, y a toda la hinchada que nos sigue por todos lados, y que ha generado tantas cosas lindas por todo el apoyo».

La experiencia
Patricio Paillán expresó que «este grupo se merecía mucho más, por todo el esfuerzo que hizo desde la clasificación para este torneo. Tengo 35 años y me cuesta ponerme a la altura de ellos, gracias a la motivación de los compañeros uno puede seguir con esto. Creo que tengo para un año más, pero siempre la última decisión queda en manos del Tano».
El marcador de punta izquierda declaró que «hicimos mucho trabajo físico estos tres meses, y por eso pudimos sostener el ritmo, en el primer tiempo los metimos en un arco y no tuvimos suerte para convertir. Ellos en el final llegaron dos veces y nos ganaron».
El defensor analizó que «estamos acostumbrados a un juego que nos caracteriza, de mucha dinámica y velocidad, mucha entrega en el medio y jugar con una línea de tres en el fondo, a todos se les hizo muy difícil enfrentarnos acá».
En su reciente campaña en el Centro Deportivo Municipal, Real Madrid consiguió 3 victorias (con Estrella Austral y los ushuaienses de Los Andes Juniors y Los Cuervos del Fin del Mundo), 1 empate (en la revancha con el otro equipo local) y 1 derrota (con los santacruceños).
Por último, Paillán reconoció que «nos costó luchar contra los delanteros de Defensores del Carmen, sobe todo en el segundo tiempo cuando los dos eran bastante más grandes que nosotros. Nos hubiese gustado tener un central bien grande, que no tuviera problemas a la hora de chocar con ellos. Buscaron nuestro error, no sacamos provecho de nuestras oportunidades y ellos sí, tuvieron esa cuota de suerte para meterla».

La visita
Tras los 90 minutos, y con una alegría mesurada, el entrenador visitante René Peneca Muñoz manifestó que «sabíamos que si contábamos con el 50% de las oportunidades que nos habíamos perdido el domingo anterior, jugando de locales, y de estar más firmes en la definición, con seguridad le íbamos a hacer daño. Considero que Real Madrid es un gran equipo, nos hizo un terrible partido en Río Gallegos, y acá no bajó los brazos en ningún momento. Tuvimos un poco más de suerte, y eso nos permitió ganar y clasificarnos».
Defensores, que juega un 90% de sus partidos de Liga en cancha sintética (en la de su propiedad o en la del Boxing Club), sintió el cambio de terreno. «En nuestra zona también estaban el Boxing y Ferrocarril YCF, los dos de Río Gallegos, pero en el debut fuimos a Puerto Santa Cruz, allí la cancha es de tierra, sin nada de pasto, y empatamos. Sabíamos que Real Madrid maneja muy bien la pelota en espacios reducidos, por tener muchos jugadores de fútbol de salón, y consideramos que si la cancha estaba en malas condiciones iba a ser tan desfavorable para ellos como para nosotros».
En cuanto al apoyo de su propia institución, Muñoz detalló que «gracias a Dios el club se ha preocupado por mantener una buena administración, y permitirme que podamos jugar este torneo. Con esta clasificación vendrá la ayuda lógica de Gobierno, y eso nos permitirá afrontar la próxima ronda (Nota de la Redacción: a esa hora todavía no se conocía el próximo rival, en definitiva, el Boxing). Vamos a seguir hasta donde los muchachos digan basta».
Muñoz había venido a nuestra ciudad hace un par de años, como delegado, cuando Defensores cayó en el debut por 2-1 con O’Higgins (Walter Mansilla y Joaquín Argüelles para el local, descontando Carlos Oliva), convirtiéndose luego en el entrenador de los riogalleguenses. «Esa vez tuvimos una actuación que quedará en el recuerdo, cuando le ganamos sobre el final por 3-2 al Boxing, con 9 jugadores, aunque ambos quedamos eliminados y siguieron O’Higgins y Lago Argentino, de El Calafate».
El único jugador local que estuvo presente en ambas ocasiones fue el ushuaiense Marcelo Sánchez.